“Mi contabilidad” del SAT no resuelve tercerización administrativa
Tabla de Contenidos
Emprender un negocio o desempeñarse profesionalmente de forma independiente, son retos que requieren de paciencia, organización, entusiasmo, estrategias de venta, nociones de gestión empresarial, conocimiento de las leyes fiscales y, en fin, de convertirse en “todólogo”.
Sin embargo, esto no tiene por qué ser del todo cierto, pues entre más nos enfoquemos en actividades que rodean a lo que realmente sabemos y nos gusta hacer, dispondremos de menor tiempo para desarrollar ese proyecto con el que soñamos, sin contar las repercusiones que podrían suscitarse por un mal control de la administración.
Ejemplo de ello es el empleo de la herramienta “Mi contabilidad”, desarrollada por el Servicio de Administración Tributaria (SAT), que se propone como una opción para que toda persona física con actividad empresarial, profesional y de arrendamiento pueda por sí misma llevar las cuentas de su negocio en orden, sin la necesidad de recurrir a terceros para llevar a cabo esta labor.
Así, aunque en principio suena bien, a la postre resulta una falacia, puesto que, aunque el aplicativo pretende “echar la mano” a los emprendedores, la realidad es que en la práctica los usuarios se enfrentan a una plataforma en ocasiones confusa y plagada de términos desconocidos dentro de sus ámbitos laborales.
Problemas comunes
Los contribuyentes que utilizan “Mi contabilidad”, aunque exentan la presentación de la Declaración Informativa de Operaciones a Terceros (DIOT), para ello deben seguir una serie de pasos dentro de la aplicación, donde pueden elegir entre diversas opciones para registrar correctamente sus movimientos, diferenciando facturas que correspondan a gastos deducibles o no, además de la temporalidad a la que pertenecen, es decir, si son de ejercicios pasados o del actual.
Esto puede provocar confusión en los usuarios, ya que es difícil que se esté familiarizado siempre de todos los términos fiscales, además de los cambios frecuentes que de un tiempo para acá han venido haciendo las autoridades con la finalidad de afinar sus estrategias de recaudación.
¿Qué hacer si no sé utilizar “Mi contabilidad”?
Las alternativas son varias; desde tomar una capacitación o ver tutoriales en internet, hasta recurrir a compañías que ofrecen herramientas de software más intuitivas conectadas a la aplicación del SAT. No obstante, volvemos al problema planteado desde un inicio: el tiempo, ese que necesitamos para desarrollar nuestro verdadero trabajo, enfocado en la ingeniería, fabricación, investigación académica, arte o cualquier otra profesión u oficio que realmente nos concierne y del cual, sin embargo, debemos declarar ingresos ante Hacienda.
Por ello, la solución más factible es recurrir a un servicio de administración de empresas que se encargue de todas estas cuestiones de contabilidad y nos permita aprovechar nuestras capacidades laborales sin distracciones ni inconvenientes derivados del cumplimiento de obligaciones tributarias.
Olvídate de todos esos trámites engorrosos sin descuidar la administración de tu negocio; llámanos y descubre lo fácil que es hacerlo con nosotros.
Apasionada por la escritura y redacción, con más de 10 años de trayectoria colaborando para crear contenido de valor, que informe a los lectores y atraiga tráfico potencial.